
Hoy me siento llamada a compartirte algo que he estado experimentando con mi ciclo este año.
Siento que la relación con mi ciclo está cambiando significativamente. Específicamente mi relación con el concepto de “Ciclo Menstrual Consciente”.
Probablemente sabes que tengo síndrome de ovario poliquístico (SOP). Este año quizás por la pandemia, quizás por otros procesos internos por los que estoy pasando, mi ciclo ha cambiado mucho (me refiero a la longitud y a otros biomarcadores).
Descubrir por primera vez las cuatro fases del ciclo y cómo cambiamos en un patrón que refleja las estaciones en la naturaleza fue increíble para mí, ¡hizo mucho sentido!
Aprendí todo esto durante el tiempo que no tuve mi período después de dejar la pastilla anticonceptiva, así que, como te puedes imaginar, tenía muchas ganas de volver a menstruar (a ciclar) y experimentar la magia de las cuatro fases por mi misma.
Eventualmente, mi periodo llegó. Poco a poco empecé a tener más ciclos ovulatorios y finalmente tuve la oportunidad de vivir las cuatro fases. Sin embargo, me tomó un tiempo comprender que cada experiencia cíclica es diferente.
Como no ovulo en todos los ciclos, no siempre experimento las cuatro fases de la forma en que me dijeron que lo haría. Me tomó un tiempo hacer las paces con esto, entender que no había nada malo en mí necesariamente, sino que ésta es mi experiencia.
Me tomó un tiempo aprender cómo hacer que la conciencia del ciclo menstrual funcionara para mí.
En ese entonces, aprendí que identificar la ovulación mediante fertility awareness podría ayudarme a saber dónde estaba en mi ciclo; así que monitorear mis señales de fertilidad se convirtió en una práctica importante.
Este año, sin embargo, mi ciclo ha estado particularmente fuera de control. La mayoría de mis ciclos han sido anovulatorios y mis biomarcadores de ovulación no son tan claros como solían ser.
En pocas palabras, este año me he sentido bastante perdida en mi ciclo.
Y supongo que debido a esto, también me es difícil identificar los diferentes cambios emocionales, mentales y espirituales a los que de alguna manera ya estaba acostumbrada después de cinco años llevando una bitácora menstrual.
Ha sido bastante frustrante… y esto ocasiona que a veces deje de registrar mi ciclo durante semanas y luego me sienta culpable por ello … es un círculo vicioso que, por supuesto, no me ayuda.
Así que recientemente tomé la decisión consciente de dejar de registrar mis señales de fertilidad por un tiempo para tener algo de paz mental. Todavía escribo en mi diario todos los días; es una de las prácticas que me mantienen enraizada. Todavía llevo un seguimiento de en qué día de ciclo estoy, pero eso es todo. Me estoy dando un descanso de lo demás.
Estos días había vuelto a sentir que la conciencia del ciclo menstrual no es para mí (al menos no ahora).
Pero en la mañana escribiendo en mi diario, una pregunta vino a mí:
¿Qué sigue siendo cierto para mí sobre la conciencia del ciclo menstrual, independientemente de cómo está mi ciclo en este momento?
Esto es lo que llegó a mí:
Honrar mi verdadera Naturaleza.
Soy la suma de todas las diferentes versiones de mí. Soy cíclica. Tengo permiso para cambiar. Soy un ser introvertido, tímido y muy sensible. Necesito descansar. Necesito espacio para expandirme y contraerme. Tener consciencia de mi ciclo me ha enseñado a aceptar y honrar quien soy, incluso mi lado oscuro.
Soy mis hormonas, pero soy más que mis hormonas.
Mis hormonas influyen en muchos aspectos de mi vida, pero no determinan por completo quién soy.
Mi auto-cuidado es primero.
Hacerme consciente de mi ciclo me ha ayudado a cuidarme más, cuidarme mejor y cuidarme primero. Siempre primero. Me ha enseñado que el cuidado personal no es egoísta. He aprendido a ser muy honesta con respecto a mis necesidades y los límites que necesito poner y a reclamar esto (incluso si es solo el 1%).
Mi cuerpo es mi hogar.
No importa dónde esté; mi cuerpo es mi casa, mi templo. Necesito cuidarlo bien con mucho amor, respeto y compasión. Y lo más importante, recordar que mi cuerpo está haciendo lo mejor que puede (siento ganas de llorar mientras escribo esto).
Mi ciclo menstrual (aún) es la herramienta de retroalimentación más increíble que tengo.
Todo lo que estoy experimentando tiene una razón; hay un gran mensaje que mi cuerpo está tratando de comunicar … y estoy escuchando.
Los ciclos están en todas partes
En la Naturaleza, en la vida, en el proceso creativo. Aunque mi ciclo no siga este patrón de cuatro fases en este momento, los ciclos están en todas partes y puedo acceder a estas poderosas energías y jugar con ellas de manera diferente.
En fin…siento que aún tengo mucho que desenterrar aquí, pero me estoy sentando con lo que ha ido surgiendo y abriéndome a una nueva definición de Conciencia del Ciclo Menstrual que se sienta más auténtica.
Si has llegado hasta aquí, ¡gracias por leer! ❤️
Me encantaría saber si algo de esto resuena contigo.. No dudes en comentar, o enviarme un mensaje directo en Instagram, con lo que quieras compartir.
Y si te sientes llamada a explorar cómo usar la consciencia del ciclo menstrual de una manera que te acerque a tí misma y a tu verdadera Naturaleza, quizás el programa de coaching menstrual sea lo que buscas. Encuentras toda la información sobre el programa aquí y puedes agendar una llamada de descubrimiento gratuita aquí o envíarme un mensaje con todas tus preguntas. ¡Me encantaría acompañarte en este proceso!

¿Quieres aprender más sobre tu ciclo y no sabes dónde empezar?
Descarga mi guía gratuita con 3 sencillos pasos para conocer tu ciclo menstrual.
Te estás registrando para recibir correos de Bajo la Carpa Roja